– El chef valenciano ofreció a los integrantes de la Falla premiada por Amstel una exclusiva «cena de sobaquillo» con una estrella Michelin.
– El chef ha aplicado sus características técnicas culinarias a un menú inédito, sin privarlo de la esencia de los sabores más reconocibles de la cocina popular local.
La comisión ganadora de PRECIO AMSTEL CATEGORÍA UNO FALLÓ‘ Tuvo la oportunidad de vivir las fallas desde un punto de vista completamente nuevo para sus miembros. Ricard Camarena, estrella Michelin y uno de los grandes representantes de la alta cocina valenciana, les preparó un menú y transformó la tradicional cena de sobaquillo de la velada de La Plantà en una experiencia gastronómica para los ganadores.
El chef ha sabido sorprender a los invitados vistiendo recetas de vanguardia tan arraigadas en la cultura popular de este festival. Así, manteniendo la estructura informal de la «cena de sobaquillo» (aperitivos para compartir y bocadillos con todo el sabor de la materia prima local), llevó su firma personal a un servicio que reunió a un centenar de miembros de La Ganando una comisión fallera. en el distrito de Ruzafa.
Para el chef de Barx (Gandía), afincado en Valencia y colaborador de Amstel, el reto era ofrecer una versión renovada de sabores que están muy presentes en la memoria de los valencianos. “Esta cena es una fiesta transversal, muy típica de toda la Comunitat, que cuenta cómo somos los valencianos en cuanto a compartir. Por respeto a su condición de ganadores del premio Amstel, queríamos que tuvieran algo verdaderamente único, especial. «
La carta incluía clásicos de su carta como la ensalada rusa, nuggets de pollo con bunyols ast o abaejo, acompañados de alcachofas fritas con yema de huevo y zaatar. Entre la variedad de bocadillos que compartían los falleros, destaca la “Peineta Fallera de Brascada”, receta que Camarena preparó en 2015 para Amstel y que recuperó cuando sintió que se adaptaba perfectamente a la ocasión y los invitados. Su base es una teja de harina de trigo crujiente, teñida de oro para recordar los tocados de las Fallas. En el interior, cabeza de lomo con pimiento cocido a baja temperatura, con cebolla pegajosa confitada y acompañada de hojuelas de parmesano y brotes.
En una velada tan especial, no podían faltar varias creaciones exclusivas. El cocinero hizo un sandwich con airbag, con un pan de costra crujiente y un interior hueco en el que se ha inyectado una emulsión de tortilla, cubierta con jamón serrano. Para dar un nuevo aire a sus tradicionales «Almussafes», el chef ha plasmado un encuentro entre tres culturas gastronómicas. Por un lado, los franceses, en el brioche; el pan oriental, humeante en lugar de hornearlo; y el mediterráneo, incorporando ingredientes clásicos de la gastronomía local: sobrasada, cebolla caramelizada y queso fundido.
La cena dejó un sabor dulce en la boca de los participantes, quienes pudieron degustar una selección de postres que mantuvieron el aire de fusión entre la tradición y la experiencia gastronómica de vanguardia del chef estrella Michelin: tarta de queso, focaccia de anís y cortes de Ferrero.
Miembros de la falla ganadora PRECIO AMSTEL CATEGORÍA UNO FALLÓ‘- El sábado recibieron otra demostración de reconocimiento a su labor, con la celebración de un concierto de la Seguridad Social, abierto al público y gratuito.
Además, ayer domingo, la Falla ganadora recibió, como parte del Premio, una creación de los muralistas florales El Taller de Clo, para la tradicional Ofrenda. Además, el pirotécnico Ricard Caballer realizó una mascletà especial en honor a los ganadores.